Hacer una mudanza nunca es una tarea sencilla, da igual en la estación del año en la que nos encontremos. Posiblemente el verano sea la elección más querida, básicamente porque hay más días libres y vacaciones para llevarla a cabo. Podrás hacerlo con más calma y menos capas de ropa encima. Pero mudarse en invierno es una idea mucho más atractiva de lo que piensas.

Algunas personas creen que una mudanza entre nieve, frío, viento y lluvia es una mala idea. Sin embargo la diferencia entre el invierno y las época de calor no es mucha. Sin embargo, hay una serie de ventajas que puedes tener estos meses cuando bajan las temperaturas. Desde Mudanzas Cano te explicamos algunos de estos beneficios de mudarse en invierno.

Razones clave para mudarse en invierno

– Disponibilidad de fechas: el volumen de mudanzas durante el verano se incrementa considerablemente. Las vacaciones de agosto suelen ser la época predilecta para llevarlas a cabo. Por eso durante el invierno habrá más disponibilidad de fechas. Podrás elegir el día que más te convengan sin pedir una cita previa y esperar la fecha que la empresa te adjudique.

– Mejores precios: al tener una disposición mucho mayor de fechas, hará que tus pertenencias no tengan que esperar mucho para llegar a su destino. Hay menos mudanzas y por lo tanto puedes conseguir un precio mejor. Al tener un volumen mucho más bajo de trabajo, el presupuesto total de tu mudanza puede verse gratamente reducido.

– Pertenencias más cuidadas: no es que, durante el verano, no cuidemos de tus cosas, eso jamás ocurrirá. Pero es cierto que, durante el invierno, el personal suele permanecer más tiempo en la empresa sin periodos vacacionales largos. Así no tendrás que preocuparte por nada ni ningún imprevisto respecto a tus pertenencias.

– Menor tráfico: salvo que escojas la Navidad para tu mudanza, por lo general en el invierno hay menos tráfico en la carretera. Hace mucho frío, bajan las temperaturas y las condiciones adversas harán que los coches disminuyan. Eso significan beneficios para ti porque tu mudanza será más rápida y tendrá menos inconvenientes.

– Menos estrés: una mudanza siempre supone una gran cantidad de estrés que saber manejar. Tenerla más o menos organizada, liberará parte de la carga, pero siempre hay algo que puede enturbiarlo. Aprovecha tus vacaciones o algún finde semana largo de esta época. Mudarse en invierno es una buena idea si tienes más tiempo libre y puedes contar con la ayuda de familiares y amigos.

¿Os hemos convencido para elegir el invierno para hacer tu mudanza?